Descripción

Al contrario que otros Áceres que se hacen árboles enormes, el Acer palmatum atropurpureum o Arce del Japón se desarrolla como un arbusto o pequeño árbol de crecimiento lento, característica que lo hace más apetecible en jardines de pequeño o mediano tamaño y de fácil mantenimiento.

Existen diferentes variedades a cada cual más hermosa. Hay una muy adecuada para pequeños jardines urbanos y terrazas: “Disecctum atropurpureum” llamado también “Ornatum” cuyas hojas son verdadera filigrana.

Las hojas del ácer son palmeadas con 5 lóbulos o segmentos terminados en punta y borde ligeramente dentado.

Su colorido va variando a lo largo del año: empiezan siendo de un profundo rojo carmín en primavera, para pasar después al naranja y al amarillo dorado en verano, al pardo primero y después al verde, en otoño y acabar su ciclo vegetativo a finales de otoño o principios de invierno, de color caldera.

Qué les gusta al Acer Palmatum:

• Un suelo arenoso y fresco
• Un lugar en semisombra
• Que lo plantemos en otoño.

Qué no les gusta:

• Un terreno calcáreo aunque mal que bien lo soporta.
• La sequedad
• El sol excesivo
• El viento fuerte
• Las cortezas de pino como acolchado. Yo no tengo experiencia directa con este dato pero tengo entendido que puede provocarle enfermedades.

Viendo lo que le va y lo que no, nos damos cuenta de que no es una planta para climas secos y calurosos pero que se adapta perfectamente al clima oceánico fresco y húmedo.

Por lo demás, es muy rústico y resistente. Soporta variaciones climáticas y heladas moderadas.

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